El queratocono es una condición no habitual, en la cual la córnea (la parte transparente en la cara anterior del ojo), está anormalmente adelgazada y protruye hacia adelante. En la mayoría de los casos, las personas con queratocono temprano notan visión ligeramente borrosa.
En los estudios iniciales, los síntomas del queratocono no son, por lo general, muy diferentes de aquellos que caracterizan cualquier defecto de refracción ordinario. A medida que la enfermedad progresa, la visión se deteriora, a veces rápidamente. La agudeza visual empeora cualquiera sea la distancia, y la visión nocturna suele ser más bien pobre. En algunos individuos la visión en uno de los ojos es marcadamente peor que en el otro. Algunos desarrollan fotofobia y fatiga ocular por desviar la mirada para poder leer, o picazón en el ojo. Alternativamente, puede suceder que la sensación de dolor sea leve o inexistente. La visión borrosa y distorsión de las imágenes, son los primeros síntomas, que aparecen normalmente al final de la primera década y a principios de la segunda. La enfermedad a menudo progresará lentamente durante 10 ó 20 años, tras los cuales se detendrá. En los primeros estudios, la visión puede estar sólo ligeramente afectada, causando deslumbramiento, sensibilidad a la luz, irritación. Cada ojo puede estar afectado aunque el grado evolutivo puede ser diferente. La córnea se va adelgazando y deformando ocasionando un astigmatismo cada vez más elevado que no puede ser tratado mediante gafas. Esta circunstancia es uno de los puntos clave para sospechar un queratocono incipiente.
Una propuesta plantea que el queratocono depende de un defecto en el desarrollo y es de origen genético (alrededor de 7% de los pacientes tienen familiares con queratocono). Esto sugiere que es la consecuencia de una anormalidad en el crecimiento, esencialmente un defecto congénito. Otra es que el queratocono es una condición degenerativa. Una tercera postula que el queratocono es secundario a otras enfermedades. Una teoría menos aceptada sugiere que puede ser de origen endocrino.
La incidencia real de queratocono no es conocida. No es una de las afecciones más comunes del ojo pero tampoco es de ninguna manera una enfermedad rara. Se estima que ocurre en uno de cada dos mil personas. Generalmente la enfermedad se presenta en gente joven hacia la pubertad. Se encuentra en todas partes del mundo sin seguir ningún patrón geográfico, cultural o social conocido.
En Aris Vision empleamos las técnicas más avanzadas. Uno de los tratamientos que hoy en día está arrojando excelentes resultados en pacientes con Queratocono es el CROSS-LINKING, es el único proceso capaz de generar nuevas uniones o puentes entre las fibras del colágeno corneal hasta aumentar significativamente la rigidez de la córnea. El implante de Anillos Intracorneales es tambien un tratamiento indicado por los oftalmólogos en pacientes con queratocono
Los candidatos ideales a este tipo de cirugía son los pacientes, a los cuales se les detectó, un espesor corneal, muy disminuido el cual no es compatible para realizarle cirugía refractiva, y pacientes, a los cuales su córnea presenta una deformidad estructural, como el queratocono.